La ley Anti-tabaco se acerca a España

Ante la proximidad de la entrada en vigor de la nueva Ley-Antitabaco, la mayoría de los fumadores aún no se han concienciado de que les queda muy poco tiempo para seguir fumando en lugares públicos. Si la reforma 28/2005 suscitó un gran debate que polarizó a la población, la ley en ciernes ha conseguido superarlo y acoger críticas de todo tipo y de todos los sectores.
Desde 2.006 está prohibido fumar en los lugares de trabajo, públicos y privados, y culturales. No obstante, era posible fumar en aquellos lugares que estaban habilitados para ello. Ahora, la Ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, pretende sumarse a la normativa Europea y elaborar una ley que prohíba fumar en todos los lugares públicos, de los que sólo 40.000 de los aproximadamente 350.000 habían decidido ser espacios sin humo o con zonas para fumadores. Por el contrario, los locales pequeños podrán seguir vendiendo tabaco a través de las máquinas expendedoras, puesto que con la medida lo que se pretende es cuidar la salud de los ciudadanos y los hosteleros. Del mismo modo, desde el 27 de diciembre de 2009 los kioscos de prensa pueden vender tabaco.
Los diferentes países de la Unión Europea también se están incorporando a la Ley Anti-tabaco o están desarrollando diversas normativas que limitan su consumo en diferentes espacios. Por ejemplo, desde hace varios años Dinamarca, Estonia, Francia, Italia e Irlanda han prohibido el consumo de tabaco en lugares públicos, de trabajo, restaurantes, bares o pubs. En otros como Bélgica y Finlandia sólo se puede fumar en las zonas habilitadas, donde no se puede servir ni comidas ni bebidas. Por el contrario, según los expertos Austria es el país europeo donde menos se cuida a sus ciudadanos de los efectos perjudiciales del tabaco.
Con estas medidas, según la Ministra de Sanidad se está consiguiendo que disminuya el número de personas fumadoras y que se conciencien cada día más de los efectos nocivos del consumo de tabaco. En 2005 se consiguió que 1.000.000 de personas dejasen de fumar, ¿cuántas se conseguirán ahora?